Tendré que
olvidarte
porque debo
de hacerlo,
compraré una
escoba, un desinfectante
y empezaré a
limpiar mi casa.
El
desinfectante evitará
que empeoren
mis heridas;
barreré cada
rincón de mi guarida
para evitar
que se quede algún recuerdo.
Y el aroma
de tu piel, ese aroma...
lo
reemplazaré con alguna esencia
de oferta en
el mercadillo.
Una vieja
amiga me ha recomendado
una piedra
de cuarzo,
que la
cuelgue en mi cuello
para evitar
otro fracaso, (otro malamor),
¡Debo de
hacerlo! ¡Sí! ¡Tendré que hacerlo!
aunque ayer
me hice leer la mano y las cartas del tarot,
para ver si
en mi futuro apareces,
para ver si
volverás a estar conmigo
pero me dicen que ¡ No!,
que te
olvide, que siga mi camino.
Y se
entristece mi esperanza y
se alegra mi
tristeza,
el insomnio
vuelve a visitarme y
me seduce en
la cama;
le hablo de
ti y de nuestro idílico romance
¡Me ha hecho
una escena de celos!
¡Me ha
amenazado de muerte!,
¡Quiero
seguir viviendo!
por eso debo
de olvidarte.